He encontrado en distintos sitios en Internet el concepto de “rúbricas de evaluación”. Este concepto se refiere a elaborar un cuadro de doble entrada o matriz donde se identifican una serie de dimensiones o aspectos que van a ser evaluados en una actividad del alumno (por ejemplo, corrección del lenguaje, estructura de un trabajo, cientificidad del contenidos, etc.) y por otro lado, los criterios de valoración (es decir, el grado o medida en que cada una de esas dimensiones se desarrolla).
En EDUTEKA hay un buen artículo sobre las rúbrica titulado MATRIZ DE VALORACIÓN que ofrece una síntesis sobre este recurso y que puede ser un texto útil para cualquier docente que desee iniciarse en este concepto. Me llama la atención de que defienden utilizar el término de «matriz» en vez de la versión anglosajona de «rúbrica». La publicación de dicho documento es de 2002, lo que indica que ya dispone de cierta tradición (aunque confieso que acabo de enterarme de su existencia hace pocas semanas).
Quisera también informaros de que existe (desde hace algún tiempo) un sitio web que ofrece un software que ha automatizado la tarea de creación de estas matrices. Se llama RUBISTAR. Aunque este proyecto y recurso está gestionado por un equipo humano norteamericano dispone de una versión en lengua española. Lo he probado y es fácil de usar.
Estas rúbricas o matrices de evaluación también son muy utilizadas en tareas o trabajos de Webquest. Por ejemplo, en el blog de L. Domenech me encontré una referencia que había publicado en 2006 en su blog A pie de Aula.
Voy a hacer un comentario muy personal (y por tanto discutible) sobre estas rúbricas de evaluación. Reconozco que este tipo de matrices o rúbricas para la evaluación del aprendizaje de los estudiantes representen un recurso para la sistematización y racionalización de los procesos evaluadores. Sin embargo, confieso que me siento «incómodo» con los mismos. Son excesivamente técnicos, racionalistas y cuadriculados. La «evaluación», por mi experiencia, tiene mucho de subjetividad, de impresiones globales, de captación de múltiples planos de la conducta del estudiante que el profesor sintetiza en una calificación.
Soy consciente que la toma de decisones evaluadoras es un proceso que debe ser explícito y objetivable -las rúbricas ayudan a ello-, pero yo sigo siendo un docente que utiliza su intuición (o llámenlo como quieran) para emitir juicios sobre los trabajos que elaboran los alumnos. Y quizás por ello me resisto a utilizar cuadros, matrices o números para valorar el aprendizaje.
De todas formas, recomiendo que visiten RUBISTAR. Seguramente para muchos docentes sea un recurso útil. Ya me contarán.
Buenas tardes aquí en Mérida, Yucatán, Dr. estoy de acuerdo con Ud. yo imparto para la Licenciatura en Educación las asignaturas de Evaluación de los aprendizajes y la asignatura de Modelos de Evaluación Educativa y desde luego para dar un juicio de valor a los aprendizajes de mis alumnos hay mucho trabajo que va más allá de la simple aplicación de una prueba escrita, es compilar tareas, ejercicios, actividades, participaciones de los alumnos, y el interés de éstos por la asignatura, sobre todo porque el contenido mismo de ésta te invita a valorar debidamente y justamente el aprendizaje del alumno. En fin, voy a visitar la páina de RUBISTAR, es bueno estar enterada de lo que ofrece la Web como apoyo a la labor docente.
Marisa Zaldivar
Estimado Manuel,
Yo uso frecuentemente rúbricas (o matrices). Las «descubrí» junto a las WebQuests. Mi valoración es muy positiva… por las razones que expondré brevemente a continuación.
1. Las rúbricas definen lo que el profesor considerará un buen producto y/o proceso y mejoran el resultado de aprendizaje de los estudiantes informándoles sobre «qué les está pidiendo» el profesor/a.
2. Las rúbricas reducen la ansiedad ante la evaluación al fijar criterios claros (o todo lo claros que se puede) y por anticipado.
3. Las rúbricas facilitan la evaluación por pares, una estrategia que uso frecientemente, combinada con la autoevaluación, supervisada por mi, naturalmente. Con una buena rúbrica, negociada en clase, un estudiante puede evaluar el trabajo de un compañero o compañera de manera «guiada». Si la rúbrica está bien diseñada, las diferencias entre jueces no son excesivamente grandes.
Mi experiencia es que cuando se les pide a los estudiantes que construyan algún artefacto (digital en nuestro caso 🙂 ), la rúbrica ayuda a definir los aspectos básicos del artefacto, pero se puede no condicionar excesivamente el contenido, dejándoles libertad para que se expresen.
Saludos.
Jordi.
jordi
gracias por tus comentarios sobre las rúbricas
este concepto de «matriz de evaluación» es bastante antiguo (lo recuerdo de mi época de estudiante de pedagogía en los primeros años ochenta). Si no me equivoco, aquel manual llamado «Didáctica General. Programación y Evaluación» de Rodríguez Diéguez planteaba cosas de este estilo
recuerdo que años más tarde, aquí en canarias, intentamos elaborar este tipo de matrices evaluadoras para la evaluación de los denominados «Objetivos Comunes» en la experiementación del bachillerato general (del año 1985 o 86 más o menos). El profesorado, de entonces, nos decía que estábamos locos……. y creo que tenían algo de razón porque multiplicando los criterios identificados para cada uno de aquellos objetivos, y a la vez cruzados con los objetivos propios de cada asignatura, salían cientos y cientos de criterios evaluadores ¡una locura!!
en fin, en mi práctica docente también he rehuido de indicadores de evaluación precisos y concretos -supongo que es una cuestión de estilo y gustos docentes-
ahora bien, reconozco que ayudan a organizar, sistematizar y racionalizar cualquier juicio evaluador
lo importante es ni ser excesivamente estricto en su aplicación ni tener fe ciega en estas matrices (que aunque se llamen rúbricas de webquest, ya tienen su propia tradición pedagógica)
saludos, manuel
Manuel
Te invito a conocer mas esta herramienta de evaluar a los alumnos. Como maestra de EFL y ESL, elaborando una rubrica para evaluar la produccion oral y escrito de mis educandos (he ensenado desde primaria hasta post universitario y colaboro con el Departamento de Idiomas en la Universidad de Michoacan, Mexico dando clases y capacitaciones a los maestros y egresados) me mantengo objetiva para calificar a mis alumnos de idioma. Se puede disenar una rubrica para cualquier asignacion o trabajo. Entonces, una rubrica de Webquest ayuda a evaluar la interaccion el alumno habia tendio al hacer un Webquest; las rubricas para calificar produccion oral, trabajo colaborativo, reportes de inestigacion todos reflejan precisamente lo que estan disenados para evaluar. Es el maestro que les disena sobre sus necesidades.
Si, no son nuevos en la tradicion pedagogica, y son muy utiles. Lo mas magico de su uso es la eliminacion del misterio que viven los alumnos; al elaborar con la maestro/a o recibir la informacion ya elaborada, ellos saben lo que esta esperado de ellos.
Lejos de ser excesivamente estricto, encuentro que me da seguridad de saber los niveles de conocimientos academicos de mis alumnos y como ayudarles a fortalecer sus puntos debiles.
gracias, ellen, por tus amables comentarios
me alegro de que tu experiencia sea positiva con esta estrategia de evaluación
sería interesante que la difundieras ya que podría ayudar a otros docentes a abordar la compleja tarea de evaluar el aprendizaje
saludos, manuel
ESTIMADOS COLEGAS DOCENTES:
me alegra encontrar un sitio objetivo que discute lo subjetivo, uqe lo vuelve -o intenta- objetivo y al final de la discusión los recultados son subjetivos. no nos confundamos. no tengo mucha experiuencia en rúbricas, sin embargo, aplico algo similar desde muchoa antes de que supiera que eran, en mi caso, por varias razones:
1. «cuantas claras amistades largas», dice un dicho muy mexicano, por lo cual se que si mis alumnos saben exactamente -o lo mas cercano posible- lo que se espera de ellos, no habrá malas intepretaciones en la medida que seamos claros.
2.- No trato de sustituir mi criterio -y por ende mi trabajo- de ser yo quien evalúe, aqui es donde las rubricas me ayudan: manejo una gama de variables a calificar (tareas, casos, prácticas, participación, examen escrito, exposición, debate, etc.)y DEFINO (creo que esa es la clave) lo que es cada variable, como se forma, cuanto vale del total de la calififación, etc. y lo entrego POR ESCRITO al principio del curso, lo que permite a mis estudiantes PLANEARSE de acuerdo a los criterios establecidos.
3.- me permite PLANEAR MEJOR mis cursos, cuando realmente se considera cual es el objetivo que se quiere lograr, que productos debe de generar, que actitudes o conductas se requierte formar y que competencias se deben de desarrollar, una vez que se tiene claro esto, la rubrica o como le llamen, debe de elaborarse para que el alumno se involucre no solo en su aprendizaje, sino tambien en su evaluación.
es más trabajo pero lo disfruto. saludfos a todos
e.rcardo Domínguez Sáinz de la Peña
ricardosainz1@hotmail.com
coordinador academico universidad dorados
Igual puede ser interesante para todos los mexicanos y latinoamericanos conocer el Centro para el diseño de Rubricas, creado por el Sistema nacional de educación a distancia.
Es un servicio gratuito:http://www.sined.mx/rubrica.html
un saludo