En estos días que se cumplen cuatro años del nacimiento de este blog tengo que confesar que cada vez me cuesta más mantener su escritura de forma continuada. Hace pocos meses atrás encribí una entrada en la que expresé que prefiero las cartas a los telegramas, que prefería la escritura larga y narrativa que representa el blog, frente a la escritura rápida y efímera de Twitter. Sin embargo, he de reconocer que los telegramas twitteros son, en estos momentos de saturación de